Nosotros unidos

Tenemos que unirnos para marchar juntos hacia el futuro. Entre todos podemos más, porque tenemos la fuerza de la unión. Todos somos más que uno solo. Y lo que uno solo no puede, para todos es fácil.
Es necesario que nos demos cuenta de que somos todos iguales. En algunas formas muy profundas, ya estamos unidos. Hagámoslo consciente. Somos lo mismo, estamos hechos de lo mismo, nos une el pasado, y también (aunque no lo sepamos) nos une el futuro. Sólo nos separa el presente perecedero.
Qué lindo sería vernos marchar hacia el porvenir, todos juntos, pensando de la misma manera, en armonía y fortaleciéndonos cada día más para luchar contra ellos.
Si no nos unimos, ellos nos van a destruir. Nos van a forzar a unirnos a ellos. Entonces, para que eso no pase, tenemos que unirnos nosotros. Sólo nosotros, los que no somos ellos, somos los que debemos formar este grupo. Ellos que hagan lo que quieran. Pueden unirse o no, no nos importa. Pero lo que es seguro es que quieren que formemos parte de ellos, y debemos impedirlo.
Entonces marchemos todos juntos. Unámonos nosotros para que no nos obliguen a unirnos a ellos. Podemos hacerlo. Igual tenemos que tener cuidado.  No tenemos que permitir que ellos se unan a nosotros. No aceptaremos intrusos. Después de todo, ellos no quieren unirse a nosotros, quieren que nosotros nos unamos a ellos. No es lo que queremos. Queremos unirnos nosotros solos. Los de afuera son de palo.
Por eso tenemos que unirnos nosotros, los de acá, los que no somos de palo. No sabemos bien de qué somos, pero lo que es seguro es que somos lo mismo.