Cómo comer las Chocolinas

Las galletitas básicas ofrecen muchas maneras de ser comidas. Las Chocolinas, con su sabor de chocolate sin complicaciones, son muy buscadas en sí mismas y también como ingrediente básico de otros platos más elaborados. La Chocotorta es el que más se destaca. Consiste en agrupar capas de Chocolinas, como en una lasagna, y separarlas con capas de alguna sustancia preparada al efecto. Puede ser Casancrem con dulce de leche, dulce de leche solo, Nutella, o la combinación que sea. Una vez terminada, la torta resultante puede ser bañada en chocolate o enviarse directamente a la heladera, para su solidificación parcial.
Otra manera es rellenar Chocolinas individualmente. Untarlas con dulce de leche y completar el sandwich con otra Chocolina. Es importante utilizar para este fin el lado plano de la galletita, porque si se usa la cara art-decó se generarán dificultades para el untado.
Pero la mejor manera de comer Chocolinas es rellenarlas con las mismas Chocolinas. El procedimiento es sencillo. Empieza con la consumición normal, como si se fuera a comer una cantidad de Chocolinas por sí mismas. Pero se anula el tragado. De esta manera, quedará en la boca una pasta consistente en las Chocolinas tritutadas. Con dos o tres alcanza para tener suficiente pasta.
Luego se regurgita la pasta hacia otra Chocolina, en su lado plano, en forma más o menos pareja. Al terminar, se le coloca una segunda Chocolina. En este momento se debe presionar. El bolo alimenticio que sirve de relleno, entonces, rebalsará, y lo que sobre será aplanado con la lengua. Quedará una deliciosa galletita doble, de aspecto similar a una Rumba, que podrá disfrutarse solo o acompañado.